El Indice de Precios de la Vivienda en México de Sociedad Hipotecaria Federa (SHF) registró un aumentó 9.9 por ciento en el segundo trimestre de 2018, en comparación con igual periodo de 2017.
Este indicador, el cual acumuló durante los primeros seis meses de 2018 una apreciación de 9.3 por ciento en el ámbito nacional, sigue los precios de casas solas, en condominio y departamentos con crédito hipotecario garantizado.
El Índice SHF de vivienda nueva tuvo una variación de 9.26 por ciento, el de vivienda usada aumentó 9.33 por ciento, el de casas solas acumuló un crecimiento de 8.9 por ciento, y el de casas en condominio y departamentos (considerados de manera conjunta) mostró una apreciación de 9.8 por ciento durante el año.
En lo que se refiere a la vivienda económico-social, el indicador mostró una apreciación acumulada en el primer semestre de 8.1 por ciento, y el Índice SHF para la vivienda media y residencial (presentado en modo agregado) se incrementó en 10.1 por ciento con respecto a 2017.
La SHF destaca en un reporte que el desempeño del mercado de la vivienda se presenta en un entorno macroeconómico en el que el PIB creció 1.6 por ciento en el segundo trimestre del 2018, de acuerdo con la estimación oportuna del INEGI.
Además de que el número de trabajadores registrados en el IMSS creció 4.1 por ciento, la tasa de inflación anualizada fue de 4.7 por ciento y la tasa de interés hipotecaria disminuyó 0.24 puntos porcentuales en lo que va de 2018, contrastado con el mismo periodo de 2017.
El reporte añade que en la zona metropolitana del Valle de México el Índice SHF mantuvo su tendencia ascendente, al acumular 8.9 por ciento en el primer semestre de 2018; mientras que en Guadalajara aumentó 11.9 por ciento, en Monterrey 9.6 por ciento y en Toluca 8.9 por ciento.
Por entidades, los precios que más crecieron a tasa anual en el primer semestre de 2018 fueron Jalisco, donde los precios aumentaron 11.7 por ciento; Ciudad de México, 10.6 por ciento; Michoacán, con 10.3 por ciento y Tabasco, con 10.2 por ciento.
¿Cuáles son los lugares con mayor número de viviendas desocupadas?
Nuevo León es el estado con mayor cantidad de inmuebles disponibles en el país, de acuerdo con el portal inmobiliario Lamudi, respecto al comportamiento de vivienda en México.
La Ciudad de México, Estado de México, Querétaro y Yucatán sumaron más de 40 mil propiedades disponibles en el mercado en el primer semestre de 2016.
¿Cuáles son los desafíos de México en el tema de vivienda?
México tiene entre sus deudas con la población, un programa real de vivienda para sus habitantes.
Ahora se ha conocido el Estudio de Política Urbana de la OCDE: México, Transformando la Política Urbana y el Financiamiento de la Vivienda donde afirma que México tiene que pasar de la construcción de casas a la construcción de ciudades habitables, que combine la infraestructura, los servicios, y los medios de transporte, con la cercanía al lugar de trabajo.
¿Qué deben hacer la autoridades mexicanas según el estudio?
Deben promover mayor flexibilidad y brindar más diversidad de opciones de vivienda para frenar la expansión urbana, reducir el número de viviendas desocupadas y ayudar a detener el “vaciamiento” de los centros urbanos.
Una mejor planificación urbana y una coordinación más estrecha entre las políticas de vivienda e infraestructura podrían mantener a la gente más cerca de los puestos de trabajo y servicios en los centros urbanos, lo cual contribuirá a que México obtenga más beneficios económicos.
En el Estudio de Política Urbana de la OCDE: México, Transformando la Política Urbana y el Financiamiento de la Vivienda, se considera que la migración a las ciudades en las últimas décadas ha aumentado los ingresos del hogar; sin embargo, no ha beneficiado a la economía en general tanto como podría lograrse.
Las zonas periféricas de las ciudades se han expandido rápidamente – entre 2001 y 2011, México tuvo la tercera mayor tasa de expansión urbana de la OCDE –, con lo cual el tiempo de traslado para los trabajadores ha aumentado, transmitiendo un costo a la productividad.
Al igual que en otros países de la OCDE como España, Irlanda y Portugal, México necesita enfrentar el alto nivel de viviendas deshabitadas (alrededor del 14%). La reorientación de políticas de vivienda enfocadas en lo cuantitativo hacia lo cualitativo es un elemento clave en esta estrategia.
Dentro de las reformas estructurales emprendidas en México durante los últimos dos años, las políticas de vivienda y de desarrollo urbano han recibido un nivel de atención y de prioridad sin precedentes.
Estas políticas buscan instrumentarse de manera coordinada y con un enfoque integral para construir viviendas y ciudades que incorporen los elementos básicos que permitan maximizar la productividad; por ejemplo, infraestructura de servicios públicos, transporte, ubicación, calidad y sustentabilidad.
“Muchas de las recientes iniciativas del gobierno mexicano, están en el camino correcto. Es necesario hacer aún más para coordinar la planeación del transporte y la inversión con el desarrollo de la vivienda, con el fin de transitar de la construcción únicamente de casas a construir ciudades bien planificadas”, dijo el Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, al presentar el informe en la Ciudad de México.
Por ejemplo, la creación en 2013 de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), encargada de las políticas de vivienda y desarrollo urbano, marcó un paso importante hacia una respuesta coordinada a los retos urbanos del país.
Asimismo, la actual estrategia del Infonavit enfoca importantes esfuerzos para cambiar su modelo de financiamiento mediante la ampliación de las soluciones de vivienda para sus derechohabientes y considerando los polígonos de contención urbana definidos por dicha Secretaría.
Casas ecológicas o verdes y vivienda sustentable
Desde hace aproximadamente 20 años, la sustentabilidad ha adquirido un lugar importante en los temas de agenda de diferentes empresas y organizaciones.
La preservación del medio ambiente y el aprovechamiento de los recursos naturales son prioridad desde el cambio climático.
Dentro del mercado hipotecario toma protagonismo la llamada “Vivienda Sustentable”, es decir, son los inmuebles que adoptan métodos para la obtención de energía y el calentamiento del agua.
Los desarrolladores de vivienda encuentran alternativas como por ejemplo, la orientación, la ventilación, el aislamiento térmico y acústico, el adecuado sombreado y el uso de aguas recicladas o de lluvia.
Además, la arquitectura de estas viviendas implica la correcta ubicación de ventanas y alerones para evitar la colocación de aire acondicionado.
La vivienda sustentable tiende a considerarse de alto costo, en realidad, las construcciones bioclimáticas incluyen materiales con valores más altos que los convencionales como pintura antirreflejante, impermeabilizantes con capa asilante, instalación de calentadores solares o celdas fotovoltaicas, además de las ecotecnologías como:
- Materiales térmicos y aislantes
- Focos ahorradores de energía
- Aprovechamiento de energía solar
- Microsistemas para tratamiento de aguas grises
- Sanitarios ecológicos
- Captación, almacenamiento y re-uso de aguas pluviales
- Calentadores de agua
- Análisis de radiación térmica e indicadores climatológicos
Para lograr una sustentabilidad en materia de vivienda se debe considerar por sobre todas las cosas una conciencia ecológica para delegar a las futuras generaciones.
El Infonavit, otorga un crédito destinado a viviendas sustentables llamado “Hipotecas Verdes”.
En México existen cerca de 50 mil casas ecológicas, este fenómeno crece lentamente aunque corresponde a un tema no sólo socio- económico, sino cultural.
Con el paso del tiempo, muchas empresas del sector inmobiliario decidieron construir “Viviendas Sustentables”, son inmuebles que poseen eco tecnologías, como materiales térmicos y aislantes, obtención y re-uso de aguas pluviales y aprovechamiento de energía solar.
Pero, ¿cuáles son los beneficios de vivir en una vivienda ecológica?
Para empezar, estaríamos contaminando en menor medida el medio ambiente y por otro lado, lograríamos una disminución en la emisiones CO2, y con la utilización de blocks térmicos podemos conservan el calor o aportan un ambiente más fresco.
Los métodos que se utilizan son:
- Calentadores solares de agua.
- Lámparas ahorradoras.
- Dispositivos para disminuir el consumo de agua.
- Aislamientos térmicos y otras tecnologías.
Una vivienda sustentable tiene un costo de entre un 25% y un 40% más cara, ya que el tipo de materiales e instalaciones son más costosos, pero hay que aclarar que se logra un ahorro en el mantenimiento del 25% mensual promedio (por consumo de luz, gas, agua).
Es necesario contar con la infraestructura necesaria para que en México una cultura de vivienda sustentable.